El árbitro mostró la roja directa a Luciano en el 47 mientras que Óscar Sánchez terminó en los vestuarios por doble amarilla
LAVERDAD.ES MURCIA.-
El Murcia se lleva un punto de un partido muy complicado en el Ramón de Carranza en el que terminó con dos jugadores menos. Luciano vio una roja directa en el minuto 47 del encuentro muy discutida en el banquillo grana.
Con diez, el Murcia se rehizo y se fue al ataque con Aguilera como único pivote. La fe dio sus frutos tras una jugada en la que Pedro combinó con Chando. El delantero grana no perdonó y situó por delante al Murcia en el momento en el que más lo necesitaba. Un minuto después tuvo que retirarse, por un pinchazo en el abductor y en su lugar entró Kike.
El Cádiz, pese a la superioridad numérica no lograba poner en apuros al equipo murciano y se escucharon pitos a Enrique, su delantero, en las gradas del Carranza. Soñaban los granas con llevarse los tres puntos del encuentro ante el líder, pero entonces todo se complicó. En el minuto 80 el árbitro señaló un penalti dudoso a favor del Cádiz que convirtió Aarón. Empate en el marcador y bajón de moral para los granas que ya sólo pensaban en el final del partido.
En el minuto 87 el árbitro expulsó por doble amarilla a Óscar Sánchez. Los últimos minutos fueron de agonía para los granas.
Al terminar el encuentro, Iñaki Alonso aseguró que el arbitraje fue contra el espectáculo: "La tarjeta roja me gustaría verla por televisión", aseguró. En cuanto a la doble amarilla de Óscar, el técnico lamentó que tal y como estaba el partido el jugador no fuera más prudente. "No fuimos listos", concluyó.
Chando aseguró estar "un poco mosqueado con el arbitraje", un poco que un segundo después era un mucho. "Lo de hoy ha sido escandaloso", aseguró a continuación. El delantero dijo que el empate "sabe mal" y recordó que "llevamos cuatro expulsiones" en dos partidos.
LAVERDAD.ES MURCIA.-
El Murcia se lleva un punto de un partido muy complicado en el Ramón de Carranza en el que terminó con dos jugadores menos. Luciano vio una roja directa en el minuto 47 del encuentro muy discutida en el banquillo grana.
Con diez, el Murcia se rehizo y se fue al ataque con Aguilera como único pivote. La fe dio sus frutos tras una jugada en la que Pedro combinó con Chando. El delantero grana no perdonó y situó por delante al Murcia en el momento en el que más lo necesitaba. Un minuto después tuvo que retirarse, por un pinchazo en el abductor y en su lugar entró Kike.
El Cádiz, pese a la superioridad numérica no lograba poner en apuros al equipo murciano y se escucharon pitos a Enrique, su delantero, en las gradas del Carranza. Soñaban los granas con llevarse los tres puntos del encuentro ante el líder, pero entonces todo se complicó. En el minuto 80 el árbitro señaló un penalti dudoso a favor del Cádiz que convirtió Aarón. Empate en el marcador y bajón de moral para los granas que ya sólo pensaban en el final del partido.
En el minuto 87 el árbitro expulsó por doble amarilla a Óscar Sánchez. Los últimos minutos fueron de agonía para los granas.
Al terminar el encuentro, Iñaki Alonso aseguró que el arbitraje fue contra el espectáculo: "La tarjeta roja me gustaría verla por televisión", aseguró. En cuanto a la doble amarilla de Óscar, el técnico lamentó que tal y como estaba el partido el jugador no fuera más prudente. "No fuimos listos", concluyó.
Chando aseguró estar "un poco mosqueado con el arbitraje", un poco que un segundo después era un mucho. "Lo de hoy ha sido escandaloso", aseguró a continuación. El delantero dijo que el empate "sabe mal" y recordó que "llevamos cuatro expulsiones" en dos partidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario